Devocional diario
Un devocional diario para fortalecer tu relación con Dios.
Devocional de Hoy
¿Cómo pueden decir...?
En el Señor hallo refugio.
¿Cómo, pues, se atreven a decirme:
«Huye al monte, como las aves»?
(Salmo 11:1)
El salmista, al poner toda su confianza en Dios, está seguro de que ninguno de sus enemigos quedará impune. David, el autor del salmo, no piensa que él es simplemente invencible - y nosotros no debemos pensar eso sobre nosotros mismos-, pues cada día tiene su propio mal. Él escribe acerca de la justicia de Dios. Dios ama a los justos y detesta a los impíos.
Aunque suframos mucho en nuestra vida debido a personas terribles y seamos perjudicados, podemos descansar en Dios. Eso es así porque él es el justiciero, el juez justo de toda realidad. Su trono está en los cielos y de allá viene todo lo que acontece aquí.
Si alguien te robó, te humilló, te insultó o te perjudicó de alguna manera y no se arrepiente, Dios lo llevará a juicio. De la misma forma sucede con nosotros: seremos juzgados a menos que nos arrepintamos de nuestros pecados y creamos en Cristo Jesús.
Practica la justicia
- Lee todo el Salmo 11
- Evalúate y considera si eres justo o impío
- Ora y confía en Dios, pues él te traerá justicia
Para orar:
Señor Dios, mi Padre, y Jesucristo mi Salvador, te ruego que me protejas y me guardes de todo mal. Cuando los impíos me amenazan y perturban mi paz, que yo esté protegido bajo tus alas a salvo de los ataques malignos. Que mis enemigos y yo nos arrepintamos de nuestros pecados y estemos eternamente a tu lado, Señor, pues en Cristo ya fueron pagados los pecados de toda la humanidad. En el nombre de Jesús, amén.
Devocional de Ayer
Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?
Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?
Tú eres el Cristo —afirmó Pedro.
(Marcos 8:29)
Jesús había preguntado anteriormente lo que los demás decían sobre él. Los discípulos fueron rápidos en responder: "Unos dicen que Juan el Bautista, otros que Elías, y otros que uno de los profetas". A veces es muy fácil hablar lo que otros dicen, pero es más difícil decir lo que nosotros pensamos de verdad. Cuando Jesús le hizo la misma pregunta a los discípulos, apenas Pedro, inspirado por el Espíritu Santo, respondió: "Tú eres el Cristo".
¿Qué hablamos sobre Jesús? ¿Qué decimos sobre Cristo con nuestros hechos? Cuando confesamos verdaderamente que Jesucristo es el Señor, Dios se revela en nosotros. Es muy importante que nuestros hechos confirmen lo que sale por nuestra boca. Cuando nuestra actitud apunta hacia Dios es como si estuviéramos gritando alto y claro que Jesús es el Cristo, que transforma vidas y que comenzó su obra en nosotros.
¡Jesús es el Cristo!
- Lee un Evangelio del Nuevo Testamento (Mateo, Marcos, Lucas o Juan). Lee sobre lo que Jesús hizo, sus milagros, su sacrificio y su victoria sobre la muerte.
- ¡Examínate! Si recuerdas que has hecho algo que no agradó a Dios, pídele perdón. Él es poderoso y benévolo para perdonar.
- ¡Ora! Dile a Jesús quién es él en tu vida.
Para orar:
¡Señor Jesús! Tú eres el salvador de mi vida y el consumador de mi fe. Perdóname por los momentos en que tuve actitudes que no apuntaban hacia ti. Quiero obedecer tu palabra, andar en tus caminos y ser un instrumento en tus manos. ¡Tú eres el Cristo! Amén.
¿Quieres conocer mejor a Jesús?
Devocional de Anteayer
Aprende a descansar con Dios
Por consiguiente, queda todavía un reposo especial para el pueblo de Dios; porque el que entra en el reposo de Dios descansa también de sus obras, así como Dios descansó de las suyas.
(Hebreos 4:9-10)
Todos vivimos días super ajetreados, llenos de actividades y de mucho trabajo. Cuando pensamos en descanso solo lo relacionamos con el período de las vacaciones anuales, el cual a menudo llenamos también con diferentes tipos de trabajos. Pero pensemos, ¿no nos mandó Dios a descansar? ¿Estamos cumpliendo con esto? La Biblia nos habla del descanso, esto es un hecho. Creamos o no en guardar el sábado debemos, como hijos de Dios, escuchar lo que él nos dice: ¡descansa!
Aun siendo Dios (y sin necesitar descansar), el Señor del universo nos dio ejemplo descansando al finalizar su trabajo de la creación. Socialmente, tenemos el sábado o el domingo destinado para descansar. Pero hay un sinnúmero de actividades que convierten muchas veces al fin de semana en uno tan agotador como los días de entre semana. Nuestro descanso espiritual está en Cristo, pero el descanso físico también necesita ser parte de nuestra agenda. Descansa con Dios y disfruta de fuerzas renovadas y aliento para el camino...
Aprende a descansar con Dios
- La necesidad de actividad constante es un vicio que afecta a muchas personas. Si este es tu caso, ora y pídele perdón a Dios.
- Considera separar un día a la semana para descansar. Aprovecha ese tiempo para estar en comunión con Dios (oración, lectura bíblica, alabanza), con la familia, con los amigos y para tener tiempo de ocio personal.
- El descanso es esencial para renovar las fuerzas y el ánimo. Aprovecha para dar una pausa a las actividades diarias, renovar la mente y robustecer la fe con el uso de la Palabra de Dios. Haz un plan de lectura y estudia más la Biblia.
- Aprovecha el tiempo de descanso para reposar y relacionarte con la naturaleza y con otras personas. No permanezcas demasiado tiempo mirando las pantallas (el celular, la computadora o la televisión).
- El otro extremo puede viciar también: ¡cuidado con la vagancia! Aprovecha bien el tiempo de forma equilibrada y con sabiduría.
Para orar:
Señor Dios, perdóname si no he destinado suficiente tiempo para descansar. Con bastante seguridad debe ser por eso que me he sentido con tanto cansancio y estrés últimamente... Necesito depender más de ti, reconocer que tú nos das tiempo suficiente para vivir una vida equilibrada. Ayúdame a hacer un buen uso del tiempo de vida que tú me das. Quiero disfrutar las cosas buenas que nos has dado, pasar tiempo contigo, disfrutar momentos de calidad con mi familia y descansar físicamente. Ayúdame a obedecer tu Palabra, trabajando de forma eficiente y descansando como tú nos enseñaste. En el nombre de Jesús, amén.
Qué es el Devocional diario
El Devocional diario es un momento especial del día que dedicas para tener un tiempo precioso de comunión con Dios. Es muy sencillo establecer una rutina emocionante de descubrimiento y crecimiento espiritual. Lo lograrás al separar un momento cada día para acercarte al Señor. Durante el Devocional leerás un versículo de la Biblia con una meditación sobre el texto. Luego, meditarás sobre las enseñanzas y cómo aplicarlas en tu vida. Al final, podrás orar.
Cómo hacer tu Devocional diario
Aquí tienes unos consejos para que aproveches al máximo la lectura del mensaje bíblico durante el Devocional diario:
- Aparta un momento y escoge un lugar específico: tu momento devocional será más provechoso si dejas de lado el ajetreo e inviertes en un tiempo placentero a solas con Dios.
- Lee el versículo o el pasaje bíblico con atención: desarrolla un estilo de vida comprometido con la Palabra de Dios todos los días y evita las distracciones.
- Lee la meditación diaria: reflexiona e intenta comprender el propósito de Dios para tu vida a través de los comentarios.
- Aplicación práctica: anota tus descubrimientos y no olvides poner en práctica todo lo que has aprendido por medio de la Biblia.
- Comparte lo que aprendiste: intenta compartir con otras personas a través de tus conversaciones e interacciones diarias lo que Dios te enseña en tus momentos de devocional diario.
¡No olvides la importancia de vivir una vida totalmente comprometida con la Palabra de Dios!